Postulado por el Club D. Libertad, recibió de mano de los ediles sunchalenses, el diploma correspondiente, junto a un presente institucional del Concejo Municipal y una réplica de una acuarela de la Casa de Carlos Steigleder, edificio declarado Patrimonio Cultural Sunchalense. El reconocimiento destaca las acciones y los proyectos que desarrollaron a lo largo de sus fructíferas vidas las vecinas y vecinos que fueron postulados.
El acto se desarrolló en la tarde del lunes 21 de octubre, en la Casa de la Historia y la Cultura del Bicentenario, donde fueron distinguidas 15 personas que tienen más de 70 años y han residido por más de 40 en nuestra ciudad.
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A continuación, transcribimos la argumentación que presentó el Club D. Libertad para que Dino Bianchini reciba este reconocimiento, haciéndolo extensivo a su esposa Hilda que ya no está con nosotros, pero que son parte de la valiosa historia aurinegra.
«Dino Bianchini nació un 26 de agosto de 1935 en la vecina ciudad de Rafaela. Pero el destino hizo que la ciudad de Sunchales sea su lugar en el mundo, residiendo a partir del año 1953.
En la Capital Nacional del Cooperativismo formó una familia con Hilda y sus tres hijos, desempeñándose en el transporte de mercadería alimenticia y como comerciante en el rubro supermercados.
A pesar de no ser oriundo de Sunchales, Dino siempre llevó los colores oro y negro en su sangre. Predispuesto para dar una mano cuando la solidaridad era moneda corriente en esos tiempos, fue un gran colaborador en las diferentes subcomisiones de básquetbol de la institución aurinegra, especialmente de las divisiones formativas, llegando a calzarse en una oportunidad el buzo de entrenador para reemplazar momentáneamente el faltazo de un Director Técnico.
¿Quien no recuerda el camión con caja térmica que utilizaba para cumplir con sus tareas laborales, transformándose en un vehículo de pasajeros si era necesario para sortear algún imprevisto que hubiera dejado sin competencia a los deportistas liberteños.
Pero como poblador sunchalense, junto a Hilda, una de las fanáticas más emblemáticas que tuvo Libertad, fueron grandes anfitriones que mantuvieron las puertas abiertas a los jugadores de otras localidades que contrataba la entidad para reforzar los planteles de básquet o de fútbol. En su casa de Julio A. Roca 68 recibían a los deportistas como a sus hijos, brindando contención, amistad y encuentros de camaradería memorables.
El Club D. Libertad postula a Dino Bianchini para recibir la distinción Antiguo Poblador de Sunchales, haciendo extensivo este merecimiento a su esposa Hilda que ya no está con nosotros, aunque su humor y arengas seguirán sobrevolando eternamente los estadios aurinegros».