El Griego terminó festejando una nueva oportunidad para salvarse del play out al imponerse 81 a 85 ante un Libertad que no mostró su mejor versión y siempre lo corrió de atrás a su rival. Nicolás Romano fue la gran figura de los cordobeses con 26 unidades aunque el goleador fue Martín Cuello, una verdadera pesadilla aurinegra con 32 unidades.
La primera etapa mostró una supremacía visitante liderada por Romano que hizo pesar su potencia física en zonas cercanas al aro. Las 11 unidades aportadas en los 10 primeros minutos junto a las 7 de Baralle le permitieron retirarse al descanso corto por 8 arriba (16-24) ante un dueño de casa que evidenciaba problemas en sus dos extremos, dependiendo excesivamente de «Loku» Cuello. En el segundo período, una arremetida local de 8-3 limó la diferencia e incluso llegaría la igualdad en 34 promediando el cuarto. Pero el tridente Romano, Moore y Martina (RoMoMa) se encargaron de ensanchar nuevamente la grieta a 8, culminando en media docena (38-44) al dirigirse a los vestuarios.
En el complemento, los Tigres irían de menor a mayor. Con los aciertos de Moore, la formación del «Turco» Arduh se alejó a una decena de unidades (41-51) pero reaccionó Libertad y con un contundente 9-0 se acercó a la mínima diferencia. El Griego volvió a responder con el trío RoMoMa para mantenerse al frente aunque las diferencias fueron exiguas porque Cuello siguió alimentando las esperanzas aurinegras, culminando el tercer capítulo con un encorsetado 57-59 (19-15).
Con 2′ de juego en el último período, el tanteador marcaba una paridad extrema: 61-61. Ahí empezaría una saga con muchas intermitencias y un arbitraje con algunas falencias, que le posibilitaría a Atenas distanciarse por algunos puntos y responder inmediatamente el dueño de casa para acercarse a la mínima. Los cordobeses construyeron una ventaja de 8 (67-75) restando 3′ para el final, Libertad estuvo a 3 (75-78) faltando 60» y un escopetazo de Barovero de 7 metros volvió a depositar una distancia de 6 (75-81) restando 42» que sonaba a sentencia. Pero los Tigres salieron con una intensa presión que desorientó al rival, le produjo algunas pérdidas para acercarse a 2 (81-83) a falta de 15″ pero cometió una pérdida fatal para que Moore escapara y enterrara el balón con todas sus fuerzas que terminó decretando el triunfo de El Griego.
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