Libertad se impuso 89 a 79 ante los juninenses que dieron dura batalla en el Hogar de los Tigres. En un cotejo poco vistoso pero muy emotivo, la formación de Sebastián Saborido pudo despegarse en los últimos 2′ para cerrar con cierta comodidad una victoria que tiene un alto significado para cumplir con el objetivo de permanecer en la categoría. Martín Cuello fue el mayor aportante aurinegro con 21 puntos; mientras que el foráneo Wiggins fue el goleador del cotejo con 25.
Con una dupla morena encendida (Wiggins – Black), Argentino pudo adueñarse de los primeros 10 minutos del duelo ante los aurinegros en un cotejo que arrancó impreciso. Los dueños de casa llegaron a gozar de media docena de puntos de ventaja promediando el cuarto pero apareció en escena Leron Black con la mano caliente para descerrejar 3 escopetazos que sumado a los rompimientos de Wiggins produjeron 19 entre los dos para que los bonaerenses se retiraran al descanso corto por 5 arriba (18-23).
Libertad tardaría más de 5′ para revertir el resultado negativo pero una vez que estuvo al frente no abandonaría el liderazgo hasta retirarse a los vestuarios. El base Figueredo sería el gran responsable de la reacción aurinegra, convirtiendo 13 unidades en este período. Con un contundente 25-13 en este cuarto, el local cerró la primera etapa por 7 arriba (43-36) ante un rival que ya no estuvo tan acertado en el ataque, especialmente porque se enfrió su dupla extranjera.
Sin embargo, los juninenses resucitarían en el arranque del complemento sustentado en la producción de Wiggins, imponiendo un 0-9 que los catapultó al frente (43-45). Los Tigres cortaron la sequía a poco más de 3′ para igualar en 45 y recuperar la delantera en el tanteador que se extendería hasta el cierre del capítulo (62-57). Saglietti y Cuello (11 entre los dos) serían los responsables de mantener el goleo aurinegro mientras Slider terminaría siendo determinante en este pasaje para la formación del «Loro» Maffei.
Los dirigidos por Sebastián Saborido mantuvieron una distancia promedio de 5 unidades en la primera mitad del último capítulo. Hasta que apareció un sorpresivo 0-4 de la visita para ponerse a la mínima diferencia (68-67) a falta de 4’16». Fue lo más cerca que estuvo Argentino en el tramo definitorio. Porque un rompimiento de Loku Cuello volvió a interponer una ventaja que se extendería a 5 unidades restando menos de 3′. Y el base Copello, de gran labor en la conducción, asestó un 4-0 letal que ensanchó la grieta a 7 a menos de 2′ para el cierre. En el tiempo restante, Libertad jugó con la desesperación del rival para terminar cerrando con cierta comodidad un triunfo que vale más de dos puntos.
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