Fueron 2 horas a puro ritmo donde 4 disciplinas del Club D. Libertad desplegaron sus talentos para que una multitud disfrute de las acrobacias en tela, la gimnasia deportiva y especialmente el patín artístico y competitivo que brilló en la flamante superficie del histórico salón aurinegro.
En la noche del viernes, un engalanado salón con telas amarillas y negras recibió a más de quinientas personas que acudieron a la cita propuesta por la dirigencia liberteña junto a las subcomisiones y profesores de los deportes que desplegarían el trabajo de estos meses en un tapiz a estrenar.
Porque la verdadera estrella de la noche fue el piso, 850 metros cuadrados de mosaicos que reemplazaron al histórico parquet y su derredor, testigo de batallas deportivas épicas que han dejado su huella en la historia aurinegra.
La apertura estuvo a cargo del presidente del club, Eduardo Grosso, expresando su satisfacción por el objetivo cumplido luego de tomar el compromiso de realizar la obra en el último festival de patín artístico: “Este piso va a aportar al salón, belleza, calidad y sobre todo seguridad para las prácticas deportivas. El eje de nuestra gestión está en la gente, en los chicos y en las obras que es lo que perdura en el tiempo”.
Desde arriba, Rodo Maretto debe haber esbozado una sonrisa. Curiosamente ese viernes habría cumplido 82 años. Siempre pregonó que los chicos tienen que estar en el deporte para ser buena gente y en esta ocasión, unos 300 pequeños y adolescentes, les dieron con el gusto.