Libertad derrotó a Oberá 87 a 76 en un duelo muy reñido, donde los sunchalenses sufrieron un arranque para el olvido pero supieron revertirlo en los 3 períodos posteriores para festejar el triunfo ante el puntero de la Conferencia Norte en el Hogar de los Tigres. Gran labor de Nicolás Copello en la conducción del equipo y clave la aparición de Bruno Barovero en el segundo tiempo (23 unidades), luego de una primera etapa donde estuvo desconocido.
Libertad pudo subsanar el mal trago de los primeros 10 minutos donde defendió mal y tuvo muchas imprecisiones en la ofensiva, a tal punto, que solo convirtió raquíticos 11 puntos. A los bajos porcentajes de enceste en tiros de media y larga distancia, se le sumó la eficaz tarea del moreno Hooper en la pintura y la puntería de Corzo que le hicieron pagar caro el tibio arranque: se fueron al descanso corto sufriendo una desventaja de 2 cifras (11-22).
Fue tan atípico el ingreso de los Tigres, que incluso un frustrado Bruno Barovero en esta primera etapa jugó poco más de 12 minutos, situación que se revertiría en el complemento. La diferencia de la visita llegó a trepar a 15 (8-4) cuando transcurría 2’30» del segundo cuarto pero hasta ahí llegó porque el dueño de casa reacciónó con el triple de Landoni para empezar a escalar la pendiente. El equipo de Sebastián Saborido le metió mucha intensidad defensiva y los misioneros se desorientaron, sufrieron varias pérdidas y atravesaron pasajes de notable sequía. Augusto Alonso fue el abanderado de la remontada aprovechando cada desatención del rival para contragolpear. El parcial en estos 10 minutos redondeó un contundente 21-13 que les posibilitó a los sunchalenses retirarse a los vestuarios por solo 3 abajo (32-35).
Ya nada sería igual en la segunda etapa. El trámite se volvió equilibrado y Oberá iba a mostrar que estaba vivo sustentado en la producción de 2 hombres: Hooper y Corzo. Incluso cuando el local intentaba ponerse a la par, la formación de Sebastián Torre se las ingeniaba para seguir al frente. Hasta que apareció el goleador de la Liga Argentina que solo había producido 3 unidades. Exactamente a los 6’40» clavó un triple y convirtió 11 consecutivos en un pasaje de casi 3 minutos para que Libertad pasara al frente restando 1’30», diferencia que se extendió a 4 en el cierre con un escopetazo de Landoni (57-53).
En el período final, el equipo aurinegro mantuvo la solidez defensiva y salvo Hooper, el resto de Oberá ya no generó riesgos ofensivos que le crearan sobresaltos aunque la diferencia siempre orilló por debajo de la decena. Los misioneros perdieron a Ludueña por 5 foules promediando el cuarto y esa ausencia los terminó de desdibujar. Para colmo, estuvieron penalizados por faltas cuando aún restaba mitad cuarto, facilitándole la tarea a Libertad que debió ir reiteradamente a la línea de libres para mantener con cierta comodidad la distancia que se incrementó en el cierre.